8 pasos para lograr que tu empresa rinda al 100%

Cuando nos movemos en el entorno de la pequeña y mediana empresa disponemos, muchas veces, de opiniones subjetivas del cómo va nuestra empresa. Usamos, en parte de ocasiones, una unidad para medir que raramente encontraremos en el museo de pesas y medidas de París. Esta unidad de medida se denomina “más o menos”.

Como sabemos, ser eficaz es básicamente conseguir el o los objetivos y ser eficiente es conseguirlos de la manera óptima, quizás con menor coste o menos necesidad de tiempo. Pues bien, para lograr que nuestra empresa sea eficiente debemos considerar que la eficiencia es normalmente el sumatorio de las eficiencias parciales de todas las personas y procesos que integran dicha empresa. A continuación, te indico algunas claves para que puedas mejorar la eficiencia de tu empresa:

1º definir y comunicar cuáles son los objetivos a lograr, por ejemplo, para este año. Tenemos claro que si no sabemos hacia dónde vamos raramente llegaremos. Y por supuesto tampoco llegarán el resto de compañeros o empleados.

2º que cada integrante de la empresa tenga claro sus objetivos individuales y que estos sean conducentes al objetivo general de la empresa.

3º medir. Nos cuesta medir, fundamentalmente, porque a veces no sabemos hacia dónde queremos ir o porque no sabemos cómo hacerlo. Aquí deberías identificar los puntos clave de la gestión de cada trabajador y definir un valor numérico o una fecha límite para que la tarea concreta esté finalizada.

4º crear un entorno agradable donde trabajar. Que sea grato sentarte en el puesto de trabajo, que haya luz, baja contaminación acústica, etc.

5º reclutar a los mejores y que se comprometan con el proyecto. Buscar a las mejores personas para las funciones a realizar y que además tengan un buen nivel de empatía e inteligencia emocional para que la relación con el resto de los compañeros y con los clientes sea óptima. Evitar ambientes de politiqueos, críticas destructivas y ambientes de toxicidad que lo que hacen es crispar, tensionar y en definitiva hacer las empresas menos eficientes. No olvidemos que las empresas son, en gran parte, lo que son las personas que la integran.

6º motivación y capacidad de autogestión. Es decir, que tus recursos humanos no solo dispongan de la inteligencia académica para el puesto, por ejemplo ser economista, ingeniero o electricista, sino que además tengan capacidad de automotivarse y autoauditar que lo que hacen está bien hecho. Lógicamente, para esto necesitamos disponer de indicadores que les orienten sobre la eficiencia de su trabajo.

7º hacer sencillo lo complicado. Es decir, como decía Albert Einstein, “todo tiene que ser simplificado al máximo”. Debemos estandarizar las tareas, las operaciones, los comunicados con clientes, etc.

8º formación continua e implicación en la cultura de la empresa. Es necesario formar al personal en las áreas que consideremos estratégicas en la empresa. Igualmente hacerles partícipes de los cambios, de las mejoras y pedirles su opinión para hacer la empresa cada día mejor y más solida.

De esta forma pasaremos de ser eficaces a eficientes consiguiendo los objetivos en el menor tiempo posible, al menor coste, con la mayor fidelización del cliente y motivando al personal haciéndoles partícipes de los éxitos de la empresa.

Espero que estas ideas te sirvan para ayudarte a conseguir una mayor eficiencia dentro de tu empresa y logres incrementar el rendimiento de forma sostenible. Hasta el próximo artículo!

«El trabajo más productivo es el que sale de las manos de un hombre contento.» Victor Pauchet